
Hans Eijkelboom ha dedicado 20 años de su labor como fotógrafo a la colección que demuestra que todos vestimos igual y que la originalidad más bien es una mentira.
Si hay algo especial en los fotógrafos es que nos comparten su visión única de la realidad. Retratan de tal forma lo que para otros ojos es cotidiano y lo transforman en algo extraordinario que nos invita a la reflexión o nos mueven fibras internas que solo las imágenes pueden lograr.
Es el caso del fotógrafo holandés Hans Eijkelboom, quien se dio a la tarea desde hace 20 años de hacer fotografías en la calle a las personas que pasan por ahí. La característica que podemos observar es cómo la moda no varía, cómo muchas personas lucirán exactamente que otras; o tal vez, cómo la búsqueda de individualidad no es más que una falacia mercadotécnica.
La forma de trabajar de este artista consiste en ir a algún lugar, generalmente cerca de centros comerciales, y esperar algo que capte su atención, Hans declaró a The Guardian que espera a que algo "lo toque" y dedica la toma del día a la búsqueda de ese elemento que le saltó a la vista. A veces, dice, es un elemento que no se vuelve a repetir y no hay tomas ese día o "Photo notes" como el llama a esas sesiones. Las Photo notes le llevan un par de horas al día, incluso, agrega el autor, a veces le toma más tiempo la búsqueda de ese elemento que cautivó sus sentidos.
El artista también explica que para sus tomas lleva colgada la cámara al cuello y un disparador en su bolsillo. Y es que, dice, no tiene tiempo de explicar a las personas lo que está haciendo y desea conservar la naturalidad de no saberse observado. Seguramente los resultados de las fotografías serían diferentes si las personas vieran al fotógrafo apuntándoles con su cámara.
En su libro People of the Twenty-First Century recopiló estas Photo notes que tomó en su país de origen pero también en varios lugares de América y en China. La colección le llevó para este libro más de 500 páginas en donde podemos apreciar en grande esa especie de poesía visual de lo común y constante de las personas de este siglo XXI; de eso que creemos individual y que no es más que una expresión común en lo colectivo.